Hacía sus proyectos para que duraran, y sabía que su arte seguiría existiendo otros cien años.
La familia de Treviño se trasladó de México a San Antonio, Texas, en 1948.
Treviño obtuvo un A.A. en el San Antonio Junior College, una licenciatura en arte en la Universidad Our Lady of the Lake de San Antonio y un máster en pintura en la Universidad de Texas en San Antonio.
En 1987 fue galardonado con el Premio Nacional de la Herencia Hispana como Artista del Año.
Jesse rompió las barreras contra los latinos consiguiendo que su arte entrara en galerías y exposiciones de museos, y redefinió la forma en que el resto del país percibía el arte tejano.
Consiguió ambas cosas plasmando en lienzos los rostros, edificios, coches y camiones de su barrio.
Documentó el West Side con gran detalle mediante pinturas fotorrealistas, y luego lo embelleció con murales que celebraban la herencia y la cultura mexicano-americanas, la historia de San Antonio y algunas de las personas locales cuyas contribuciones sociales podrían haber pasado desapercibidas de otro modo.
El arte de Jesse está por todas partes en San Antonio: en cafés, iglesias y negocios.
San Antonio era su hogar, su musa, su inspiración y su lienzo.
Hizo sus proyectos para que duraran, y sabía que su arte seguiría existiendo otros cien años.